Página 37. Ojos de ciudad

Le llevará un segundo conocerla
sin hablar.
Lejos de su ciudad natal,
toma rumbo
hacia la nada popular.



Aliento a muerte, el tiempo ya no lo hiere.
Siempre otoño.
Él ya no será uno más.



Curioso y marginal, sus ojos reflejan
la ciudad
Mira las marcas en la piel
de la gente
y no sabe disimular.



Busca un alma caminando entre los cuerpos
y, aunque quiere,
no la puede imaginar.



Mira a la gente y lo único que entiende va
más allá.
¿Por qué le temen a la muerte
si ahora, vivos,
apenas saben caminar?



Las luces empiezan a herirlo.
Pisa el cielo ahí caído.
¿Es que todo es irreal?



Las torres lo acusan de soledad
al pasar.
Los pies lo quieren devorar
y se marea
pero aún la quiere encontrar.



Busca ese alma que lo cuide,
un suspiro que lo acune,
que lo quiera sin hablar.



Entre la jungla de sacos la descubre
sin mirar.
La encuentra abandonada
entre las risas falsas
y sin más me viene a buscar.

Comentarios

Entradas más populares de este blog

Esas guitarras de mierda de los Flaming Lips

Desengaño

Semblanza del odio entre Aristide y Jean-Jacques