Entradas

Mostrando las entradas de marzo, 2005

Ya llegan las noticias cruzando el mar

Al entrar a este locutorio sentí el olor de mi viaje a Bélgica, tal vez el de algún té especiado o un bistró de paredes amarillas o un bol con hierbas silvestres aromáticas en el living de gigantescos ventanales con bosque siempre nublado atrás o una chica del colegio en Louvaine La Neuve. No sé a ciencia cierta de qué se trataba y, si bien no se relacionaba directamente con lo que me hizo franquear la puerta, venía a cuento. Se trata de ecos y reflejos. (Lástima que el pibe haya puesto a Luis Miguel o algo así. Cuando entré había silencio.) Me dirigía hace un rato (o me dirijo, porque aún no llegué) a la cooperativa de la calle Azcuénaga por un trámite laboral. Estas mañanas que le robo al trabajo son siempre un placer y si, como hoy, hay sol y el fresco me hace sentir frío en los brazos (anoche llovió y yo salí con remera, sin sospechar que habría cambiado el clima) me gusta pasear como un turista. Acabo de caminar por los pasajes Dellepiane y Del Carmen, admirando los stencils y lo